Los sueños siempre se han metido de lleno como uno de los temas que más interés ha suscitado en relación sobre todo a lo que no se puede explicar.
Y ahora mismo hay varios investigadores tratando de dar respuesta a muchas cuestiones que ya en su momento los psicoanalistas trataron en profundidad.
El estudio que se ha dado a conocer es de lo más revelador en lo que se refiere a cuestiones oníricas, como hemos tenido la ocasión de comprobar.
En base a un estudio reciente podemos dar respuesta a estas y otras muchas preguntas que han ido surgiendo con el paso del tiempo entre las personas.
Otra de las grandes preguntas de la humanidad ha sido el por qué algunas personas son capaces de recordar totalmente lo que han soñado y por qué otras en cambio lo olviden totalmente.
Un grupo de científicos del Centro de Investigaciones de Neurociencia en Francia han estudiado rigurosamente por qué algunas personas olvidan y otras no lo que sueñan.
Para perseguir este objetivo llegaron a estudiar a 21 voluntarios para recordar en la medida de lo posible lo que habían soñado.
Este primer grupo lograba recordar casi 5 días de la semana lo que soñaban día a día. Por otra aparte los científicos también estudiaron a 20 personas que no recordaban casi anda de lo que habían soñado.
Para realizar este análisis pusieron en las cabezas de los voluntarios unos electrodos capaces de registrar toda la actividad cerebral.
De esta forma consiguieron descubrir que la mayoría de las personas que recordaban sus sueños tenían un oído más sensible.
También, el grupo de investigación realizó diversas imágenes cerebrales y pudieron observar que las personas que recordaban sus sueños con mayor facilidad tenían una alta actividad cerebral tanto despiertas como dormidas.
Perrine Ruby, uno de los investigadores de Francia explicó que: “Esto puede explicar por qué los `buenos recordadores` reaccionan más a los estímulos ambientales".
Y añaden al respecto "están más atentos incluso cuando duermen y, por lo tanto, registran mejor sus sueños en la memoria en comparación con los pobres recordadores”.
Otra de las conclusiones que a las que llegó un neurocientista estadounidense por su cuenta, Robert Stickgold fue que las pruebas demostraban que “las personas sueñan con temas que a nivel emocional son importantes. Incluso, pueden soñar con el desafío de resolver un problema que los tiene preocupados”.
Y es que poca duda cabe de que estamos actualmente ante la segunda edad de oro de reinterpretación de los sueños, tal y como podemos deducir por la gran cantidad de estudios que hay acerca de ello.
Vigilaremos todos las informaciones recientes adicionales que vayan surgiendo en torno a los estudios diferentes sobre los sueños que vayan surgiendo en el futuro, que seguramente no serán pocos ni mucho menos.
Qué es un sueño, cómo nos movemos por sueños, qué nos pueden deparar y sobre todo, por qué se producen, son algunas de las cuestiones claves a responder.
Y es que muchos de los que hayan encontrado este estudio algo revelador podrán tener ahora en cuenta muchas de las cuestiones que se habían preguntado pero que no había tenido posiblidad de llegar a entender.
Fuente: Ideal
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